Óscar Contreras, abogado y presidente de la Fundación Nacional para la Conservación del Hábitat Boscoso de la Mariposa Monarca, ha dedicado más de dos décadas a salvaguardar una de las maravillas más notables de la naturaleza: la migración de la mariposa monarca. Cada año, millones de estas mariposas emprenden un viaje de hasta 5.000 kilómetros desde Canadá y Estados Unidos hasta los bosques montañosos de México, un fenómeno que Contreras busca proteger mediante la iniciativa Ruta Monarca.
La visión de Contreras nació de una preocupante observación durante un vuelo sobre Toluca, México, donde el impacto del cambio climático y la deforestación en el hábitat natural de las mariposas era alarmantemente visible. Desde entonces, se propuso mejorar las condiciones a lo largo de la ruta migratoria de estas mariposas, crucial para su supervivencia, a través de la creación de jardines agroecológicos.
Estos jardines no son solo un refugio para las mariposas durante su arduo viaje, sino que también funcionan como “restaurantes” y “cunas”, donde las mariposas pueden alimentarse y reproducirse en un entorno seguro. La selección cuidadosa de plantas nativas en estos jardines asegura la sustentabilidad y la atracción para las mariposas, además de educar a la comunidad y generar ingresos económicos para los propietarios de las tierras.
La “generación Matusalén” de mariposas monarca, que vive hasta ocho meses y realiza esta migración única en su vida, demuestra una increíble capacidad de orientación, un “GPS biológico natural”, que fascina a científicos y conservacionistas por igual. Estas mariposas no solo embellecen el ambiente, sino que también juegan un papel crucial en la polinización, un proceso esencial para la vida en nuestro planeta.
Contreras ve a la mariposa monarca como un símbolo de esperanza y resiliencia, un recordatorio de que aún hay tiempo para actuar contra la crisis ambiental. Su trabajo resalta la interconexión entre la conservación de la naturaleza y la sostenibilidad humana, demostrando que la protección de especies como la mariposa monarca es fundamental no solo para su supervivencia, sino para la de todos los seres vivos en el ecosistema.