Sarah Jessica Parker, icónica por su papel de Carrie Bradshaw en Sex and the City, ha respondido con firmeza a los comentarios sobre su envejecimiento tras el estreno de And Just Like That. La actriz, ahora con 59 años, se enfrenta a las inevitables marcas del tiempo, algo que ha sido foco de numerosos comentarios en redes sociales.
En una entrevista con Vogue, Parker destacó la doble moral en las críticas hacia las mujeres por su aspecto físico, comparándolo con la aceptación hacia los hombres, como su amigo Andy Cohen, que lucen su cabello gris con orgullo. “Hay tanta charla misógina en respuesta a nosotras que no se daría en el caso de hombres”, expresó, cuestionando por qué las canas son aceptables en los hombres pero motivo de crítica cuando se trata de mujeres.
La respuesta de Parker a las críticas ha resonado en todo el mundo, mostrando su rechazo a la presión de lucir perfecta y su decisión de envejecer de manera natural. “Sé cómo me veo. No tengo otra opción. ¿Qué voy a hacer al respecto? ¿Dejar de envejecer? ¿Desaparecer?”, fueron las palabras con las que Parker confrontó las expectativas irreales y las críticas frecuentes que enfrentan las mujeres en la industria del entretenimiento y más allá.